domingo, 24 de abril de 2016

"Se solaza en la mente la legión de demonios 
Respiramos y un río invisible  de muerte 
Baja a nuestros pulmones entre sordos lamentos"

Y luego jugamos, de tiempo y espacio por el hecho de no quedar fuera del juego, apercibidos de sanción desde el primer día.
Nos excusamos en el momento, 
El puto momento que nunca es el adecuado 
Y la mierda esa de que somos los recuerdos que nos dejan.

Y somos culpables.

Mas que trenes acabamos perdiendo horizontes 
Hundidos en charcos de agua salada y tinta sobre folios
Hacemos náufragos de versos en barcos de papel, preciosos, pero son patera, tocados y hundidos.
Como todo, como todos.
Juzgando sentimientos, que intentan dejar de serlo por medio de sangre, café, insomnio, demonios, tinta
Verso.

Perdido el horizonte y su aduana entre el miedo y tus piernas.

Volví a escribir y borrar, sangrar y beber, y beber y beber y masturbarme.
Y seguí fumando demasiado y en mis trece, arrastrándome a cuatro  hasta mi cama y volver a.

Tiempo, juez y verdugo que siempre trae igual veredicto y sentencia

A jirones es cuando mejor se versa, y yo no quiero
No quiero musa
Ni sentencia
Ni jurado
Ni patera

No quiero mas poesía que la de los hoyuelos de tu comisura
Que si la sentencia es muerte, que sea entre tus piernas.

Que solo tenemos una vida, y ya le robe seis a un gato por los andenes y esperas.
Y esta, igual es la mía y nos disfrutamos a morro. 

"Por que no te quedas quieta, le dijo el sol a la luna, si dejas que yo te cuide brillaras como ninguna" 


domingo, 3 de enero de 2016

Putos desvaríos de un gilipollas a las 4 de la mañana. Experto en ocultar.

Experto en ocultar.
 “Toma, no quiero más ilusiones, 

Que todavía me duelen las heridas con tu nombre
Para, por dios deja de mirarme, 
Cada vez que tú te marchas a mí me hierve la sangre. 
¿Porque no te quedas quieta? 
Le dijo el sol a la luna; 
Si dejas que yo te cuide brillarás como ninguna. 

Corre, aprieta la mano y corre, 

La vida te está esperando, 
Las nubes pintan tu nombre

“Deja, que me vuelvo para casa, 
Tan solo estaba soñando, 

Tengo un nudo en la garganta… 



Sueña, la luna sigue soñando, 
Si miras a las estrellas parece que está llorando. 
Si eso no me digas nada, 
Que tú la estabas mirando, 
Las flores de tu ventana las regaste con su llanto

“Pasaron los cuentos los que me contabas, 

Todavía sueño con esa mirada; 
Me subí a las nubes toque la más alta; 
Me agarre a un recuerdo por si regresabas,


Llevo poco más de una semana con esta canción en bucle
Y parce que llueve un poco más en mis costados
Me duelen los posos del último café
Ya ves, hoy he vuelto a soñar contigo y he mentido,
Me miento y digo, que no te pienso más veces de las sanas al día
Todo son mentiras
Incluso algún día llego a creérmelas, y me siento fuerte, pero no.

Supongo que estamos en fechas de reflexión
De balanzas y balanceos por las copas de más.
Estoy cansado de ver propósitos de año nuevo huir calle abajo
Y gente buscándolos en el culo de sus vasos.
Y yo tan yo sin besos, ni versos ni yemas
Y yo tan yo.
Tan de fallar mis propósitos
Que mi único, es seguir siendo yo
Me lo tomo como amenaza.

Ya ves, estoy cansado de condenas,
De pensarte, mentirme, creerme fuerte y derrumbarme con dos versos baratos.
Te hice musa y es lo último que quise hacerte.

Ha sido un 2015 poético
Y eso es una putada.

Hoy la culpa de mis errores pesa un poco más
Hoy me arde ese de vez en cuando de la sal en las mejillas.
Hoy he pedido perdón
Por no haber sido yo, con quien lo merecía.

eso de... que sonreír es gratis
Pero tu podrías cobrar por la tuya.
Pues eso..

Reflexiones.. propósitos.. derrotas
Siempre es eso ¿no?
Derrotas.
Me masacro pensando en quien lo haces tu
A quien escribes
O por quien

Te odio. Odio las canciones de amor 

que traen tu recuerdo a mi casa. 
Las ganas de verte. 
Y odio 
el cielo en tu rostro y las dudas 
de echarte al olvido o llamarte 
para contarte qué sé yo, 
que sigo existiendo”


Definitivamente a mí me merecía la pena
La alegría y todas las putas estaciones
Ya sabes.. eso de las que si, en negrita y cursiva y mayúscula y toda puta exageración es poca
Pero y ¿tu? ¿me merecías? ¿me mereces?
¿Realmente eres lo que me versaste?
Ojalá y sin forzar, reviente todos tus muros, y redecoremos esa trinchera.
Y que se escriba sola la declaración de intenciones.

Pero cada vez creo más ciegamente, que nunca fui yo.
Ojalá y me equivoque, y descumplas los propósitos de mi adiós.
Que cada vez que asomas, me ahogo
Por versarte en un folio y no en la cama, quiero morder tus ligas
Y solo muerdo el filtro de un cigarro que me quema cada noche.

Conozco mis errores, y sus remiendos.
Y estoy dispuesto, como dice Robe,
“Siempre en estado de espera”
porque el “me merecía”, es un me merece, con s y en todas mis terminaciones nerviosas.

Putos desvaríos de un gilipollas a las 4 de la mañana,
Igual y solo es eso, con las letras de Ismael, o Andrés,
O cada verso de Loreto y Escandar
O tu puta sonrisa.

Es increíble que a pesar de las todas y cada una de las cosas que me han dolido, siga en mis trece, ni yo lo entiendo.
Igual y esto no es solo un borrador más de tantos, que dejo en el tintero del olvido, igual y yo, no estoy a medio camino entre la nada y el olvido. Creo que hoy he comprendido todo, e igual, si un día quieres, te lo explico.

Igual y este no solo es otro borrador.
Igual y un día aprendo a bailar.

Fotografía, porque no se ponerme delante de una cámara, ese no es mi lugar,
Soy de estar detrás, y editar, y escribir
Experto en ocultar
Y tragarme por mucho que escueza.
Puede que sea la solución a todo.

Feliz 2016, ya sabes mi amenaza, o mi propósito. 


miércoles, 16 de diciembre de 2015

Delirios y entre notas

"Y tú sientes a pesar de las hostias.
Y eso merece por lo menos un brindis que se estará haciendo en alguna parte del mundo en este momento.
Si no vives con corazón de poco sirve." W.

De esto que te aprieta el alma, igual por todos los errores que has cometido y decides desaparecer, perderte, para cambiar, dejar de ser tu y encontrarte en los mas hondo de una soledad que se antoja demasiado ocupada. Como para atenderte. pido un bis conmigo, a ver que surge.
Me diste un beso de pelicula y adelantaste a los créditos.

Asumo que soy más bonito en voz que en persona.

Entre mi entierro y tus alas
Podría escribir un manual sobre como hacer el gilipollas.
y el silencio en tantos brazos 
decir adiós en un papel.

Delirios y entre notas de una cabeza a demasiadas revoluciones, o un pecho en reformas. 

martes, 8 de diciembre de 2015

Palabras



Las palabras no son materia que pueda mecer el viento
siempre hemos estado equivocados.
Solo son eso, palabras
alivian y duelen,
abrasan, arraigan e incluso echan raíces
cuando provienen de quien puede ahogarnos.
Y “menos mal que con los rifles no se matan las palabras”.

“Si nunca escuchas nada y yo gritando hasta dejarme la voz”
Te echo de menos,
cuatro palabras
salvavidas hecho frase, que se hace de rogar en tu orilla
y apenas me quedan hielos.

Las palabras no crean insomnio
es quien las dice o deja de.

¿Sabes? Asumo que soy más bonito en voz, que en persona.
Y parece que ser feliz tiene obsolescencia programada,
pero que bien suena eso de
“donde el tráfico sea de risas y tu boca una autopista frente a un atardecer”.

Supongo que es cuestión de prioridades, eso ha sido siempre,
yo no soy, y nunca aprenderé a ordenar las mías.
Muero pensando para quién escribes,
afirmando que eres la resaca más bonita que he tenido.

Hipocresía es pensar que duele más el silencio
que unas palabras vacías, mientras marco tu número
a la espera de que salte el buzón y no tener cojones a pronunciar palabra
o quedarme sin ellos dándome cabezazos contra tus corazas, a la espera
de encontrar luz en una mínima grieta.

Quedarme a vivir en el vértigo, mientras enmudezco gritando mi canción favorita, y callo susurrando a un folio lo realmente importante.
Hace tiempo, el mismo, me hizo dejar de confiar en eso de pedir deseos, y desde que llegaste huracán, soplo cigarros pidiéndote un rato más, que todo contigo me sabe a poco, y en nada, me has llenado de vida.
Y sí, me siento gilipollas, no se hacerlo bien y eso de aprender a bailarte me está cobrando un par de años de la mía, y aun así no pienso huir, mi cabezonería y tu asentir a lo bueno de mis ganas de tu espalda, ojala pronto nuestro bis y matemos la cordura, un baile en nuestra guerra, que mi almohada añora tu olor y mi barba los enredos de tu pelo.

Éxtasis al ahogarme en tu boca y no entre más palabras,
Hasta reventar todo resquicio de trinchera,
Tengo más versos que escribirte en la espalda
Que deudas tienen tus costillas con mis yemas.


Y pienso endeudarnos hasta quedarme sin huella dactilar. 
                Como un "no pienso despedirme de ti" 
frente a las vías de casa de campo.
Que tienes las palabras llenas de besos, y yo me muero de ganas.

martes, 1 de diciembre de 2015

1:35

Hoy va de mí, no es poesía, nunca lo es, y seguramente no sea bonito, tampoco lo intento. Hoy quizás sea el desangre llevado a su máximo exponente, o quizás una triste carta más a mi yo de ayer, o de mañana, o quizás sea eso, que nunca sea hoy.
Hoy el mundo ha podido conmigo, el pensar me ha golpeado todas las costuras abriendo viejas cicatrices, ya lo escribí hace tiempo, el vértigo no es la caída, sino la distancia de la boca al suelo una vez te has levantado.  He tragado versos que me han derribado las costillas poniendo patas arribas la poca firmeza que me queda.
Me he puesto una lista de reproducción con Andrés y Mariscal, y noto como tiembla el suelo bajo mis pies. Acostumbro a dar todo para ser un nadie cualquiera, “la suerte es una ramera de primera calidad” y acostumbro a pagar en carnes.
“Voy empeorando por momentos y me pierdo, intento de nuevo levitar sin más” como buscar el huracán que arrase las arenas de un reloj, en horizontal. Sangro por no reír, ya sudo todo lo que lloro y por placer, follo menos de lo estipulado en los derechos humanos. “Ya me he dado cuenta que no paro de fallar”, y la culpa es solo mía.
Sinceramente, no se cuanto más darán de sí mis versos, o cuantas bofetadas de trenes más aguantara mi cara, ni cuantos pisotones mis pies mientras aprendo a bailar.
Estoy cansado de cruzarme con el espejo y ver reflejado un gilipollas en mayúsculas y negrita, cuando aprenderás me dice, cuando aprenderás a coger las riendas de tu vida, y no regalarla por versos de dos duros.
Cuando vas a cambiar… prometo no olvidarme de quien soy, pero prometo no dar nada, para quien soy nada.

Mientras corre la tinta veo mi sangre llenar el tintero, me laten los dedos y se frustra la esperanza “de volver al mundo del cigarro de después”, de crecer en los columpios y madurar frente a un nesquik mientras mi abuela me hace un jersey, y que mi cuaderno sea de mates, y no un guion con las 1001 mejores formas de fracasar.

jueves, 26 de noviembre de 2015

Todo muy putada.

Ya ves, sigo echándote de menos, pese a tus intentos de que te eche de más.

Todo muy poético, 
Todo muy putada. 

Todo muy, soy gilipollas.